
El Gran Santo Domingo se aboca a un gran caos ambiental, ya que es imprescindible el cierre del vertedero a cielo abierto de Duquesa, donde permanecen mal manejados más de 22 millones de toneladas de residuos sólidos, lo que genera un alto grado de contaminación al subsuelo por la emisión de lixiviados que van al río Isabela y la contaminación del aire como resultado de la emisión de gas metano.
El consultor en asuntos municipales Waldys Taveras estima que el caos ambiental también se extiende a otras localidades del territorio dominicano, donde operan 240 vertederos de basura a cielo abierto, pero que tienen en Duquesa al más grande de toda Centroamérica y el Caribe, donde diariamente ingresan cerca de 4,500 toneladas de basura.
Cita otros vertederos a cielo abierto en Haina, San Cristóbal y Villa Altagracia, los cuales debieron estar cerrados como resultado de la promulgación de la Ley 225-20, de Gestión Integral y Coprocesamiento de Residuos Sólidos.